Ya pasaron dos semanas desde la última vez que vi a Rodrigo.
Solo hemos podido marcarnos por teléfono unas cuantas veces. El tiene mucho
trabajo y nuestros horarios no concuerdan. Mis padres salieron todo el fin de semana.
El sábado fue el concierto de Carla Morrison, pero no tenía mucho dinero para ir. Tuve que estafar a mis
padres antes de que fueran de viaje. Portarme bien toda la semana para que me
dejaran un poco mas de dinero. Eso de lavar los trastes, el baño, tener mi
cuarto bien recogido, no irme de borracha entre semana y lavarles su ropa en
verdad fue estresante, pero al final valió
la pena el sacrificio.
Le dije a Rodrigo que
fuéramos pero me dijo que no podía. Me fui con mis amigos de la preparatoria. El
concierto estuvo espectacular. Primero tocaron tres bandas de la cuales no
recuerdo sus nombres pero pusieron buen ambiente entre la bandita.
Carla cantó al final. Esa mujer en verdad hace que se me enchine la piel cuando escucho
sus canciones. Todos estábamos disfrutando del concierto hasta que un tipo
todo borracho se puso de impertinente. Le quería pegar a dos de mis amigos
porque eran gays y se estaban besando.
El tipo iba acompañado de dos chicas. Mis amigos no se
aguantaron el coraje que tenían por todas las estupideces que aquel imbécil les
estaba gritando, así que se le fueron a los golpes. La tipas que iban con el
nos echaron bronca a mí y a mis amigas. Armamos un desmadre. Los de seguridad nos
sacaron.
Que pena nunca me habían sacado de un lugar de esa manera. Me
fui con mis amigos a mi casa a curarnos las leves heridas que teníamos. Ya ni
ganas de seguir la fiesta nos quedaron. Nos quedamos dormidos.